Phanom Yeerum (Thai: พนม ยีรัมย์, Khmer: ចាភ្ំ យីរុាំ) (nacido el 5 de febrero de 1976 en Provincia de Surin, Tailandia), conocido como Tony Jaa, es un actor, coreógrafo de escenas de acción y artista marcial tailandés conocido por películas de artes marciales como Ong-Bak: El guerrero Muay Thai (2003) y Thai Dragon / El Protector (2005), así como las secuelas de estas.
Es experto en el manejo de espadas y altamente entrenado en gimnasia y en artes como Wushu, taekwondo, Muay Thai y Muay Boran. Desde los doce años, el actor ya soñaba con convertirse en el nuevo Jackie Chan. En cierta ocasión, después de verle en una película, supo en lo más hondo de su ser que quería ser como él. Comenzó a practicar artes marciales en todo momento libre que tuviera. En el preciso instante en que comenzó a estudiar el bachillerato, vio algo que le cambió la vida para siempre. Se trataba de un film de acción con el título de Born to Fight: era la primera versión, realizada en 1984. La producción estaba dirigida y protagonizada por Panna Rittikrai. Dándose ahora perfecta cuenta de que existían auténticas oportunidades para los actores de acción en Tailandia, Tony empezó a estudiar incluso con mayor energía y entusiasmo, llegando en ocasiones a prescindir de las comidas para poder seguir practicando más tiempo. Tras acabar el bachillerato elemental en el instituto, Tony decidió convertirse en actor sin dudarlo. Le pidió a su padre que le permitiera permanecer bajo la atenta mirada de Panna Rittikrai, quien se hallaba rodando en la vecina provincia de Kon Kaen. El mismo día siguiente, en el marco del Hotel Kan Inn, Tony logró entrevistarse con su ídolo Panna. Éste le sugirió que se concentrara en finalizar los estudios, aunque si era su deseo, podría reunirse con él en las sesiones de entrenamiento durante los descansos centrales y finales. Durante los tres años siguientes, Tony fue obteniendo mucha experiencia al lado de Panna mientras éste trabajaba en las localizaciones. Comenzó como el meritorio de los cafés, para ir ascendiendo ayudando a trasladar el equipo y las guías de la Dolly. Tony todavía supo hallar tiempo, en medio de sus obligaciones, para concentrarse en los entrenamientos de artes marciales.