Paolo Villaggio (Génova, 30 de diciembre de 1932-Roma, 3 de julio de 2017) fue un actor, cómico, director y escritor italiano. Con su desacralizante y grotesca ironía, fue uno de los primeros actores brillantes en Italia que, a través de la sátira, logró hacer reflexionar sobre los problemas de nuestra sociedad. Su nombre está ligado indisolublemente a la figura del contable Ugo Fantozzi, su criatura cinematográfica más afortunada.
Tuvo una infancia bastante pobre y carenciada debido a la Segunda Guerra Mundial. Diría años más tarde:
Finalizados sus estudios de contabilidad, Villaggio tuvo distintas ocupaciones, pasando de camarero a locutor de la BBC, y de artista de cabaret a animador en cruceros, junto a su amigo Fabrizio De André, y del teatro al trabajo como empleado en la Cosider: Es en esta experiencia en la que Paolo Villaggio se inspira para la creación del contable Ugo Fantozzi, claramente autobiográfico, que posteriormente lo volvería popularísimo.